En la localidad de Florida, Región del Biobío, una de las zonas más afectadas durante el mega incendio del último verano, se realizó el lanzamiento de los “Pilotos de innovación territorial en restauración post incendios”, un instrumento generado por el Ministerio de Agricultura, a través de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), que busca desarrollar un programa que abarca experiencias piloto en una comuna de cada una de las regiones más afectadas por los siniestros: O'Higgins, Maule y Biobío.
La iniciativa, en la que también intervienen
el Instituto Forestal (INFOR), la Corporación Nacional Forestal (CONAF) y el Instituto de Investigación Agropecuaria (INIA), busca entregar herramientas para generar un sector silvoagropecuario resiliente frente a futuros desastres, tanto a nivel de ordenamiento territorial, como a nivel de estrategias preventivas y de diversificación productiva.
El lanzamiento se hizo en presencia de los agricultores beneficiarios de este proyecto en el Biobío y los equipos técnicos asociados a estos tres pilotos, y fue encabezado por el Ministro de Agricultura, Carlos Furche, junto a la Directora Ejecutiva de FIA, María José Etchegaray; el Director Ejecutivo de INFOR, Fernando Rosselot; el director del Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP), Octavio Sotomayor; y la Secretaria Ejecutiva de la Comisión Nacional de Riego (CNR), Loreto Mery.
Estos pilotos tendrán una duración de tres años y serán implementados y coordinados por las siguientes entidades del Ministerio de Agricultura: INIA en Pumanque en la Región de O’Higgins; CONAF lo hará en San Javier en la Región del Maule e INFOR en la comuna de Florida de la Región del Biobío.
Al respecto, el Ministro Carlos Furche planteó que "este es un proyecto que hemos impulsado en las tres regiones que resultaron más afectadas por los incendios de comienzos de año y trata es de estimular que las comunidades locales puedan generar una estrategia de recuperación de lo que fue afectado, introduciendo innovación tecnológica, diversificación productiva, de manera que la resultante final sea generar condiciones para que esto no vuelva a ocurrir. Estamos muy esperanzados que este proyecto tenga un impacto que vaya más allá del territorio en el cual se está comenzando a desarrollar y que tiene que permitan fortalecer este proyecto que es a tres años y que estamos lanzando ahora”.
Este trabajo basado en un enfoque territorial busca recuperar y consolidar la capacidad productiva del territorio y comunidades afectadas, así como restaurar el patrimonio natural y los servicios ambientales asociados a éste, impulsando una red de innovación interregional, generando sinergias entre los territorios afectados. Para velar respecto a la conexión entre las tres iniciativas, FIA creó un comité directivo compuesto por diferentes servicios del agro, así como la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático.
Por su parte, María José Etchegaray, indicó que “hemos focalizado el trabajo desde el manejo sustentable de los sistemas productivos, articulando a diversos organismos para generar un instrumento que permita a los pequeños agricultores estar mejor preparados para los futuros incendios”.

En INFOR, en tanto, ya comenzaron el trabajo en el Biobío, en la comuna de Florida, donde 32 mil hectáreas fueron quemadas, lo cual representa un 52% de la superficie comunal, de las cuales 12 mil hectáreas se encuentran en grados de severidad media-alta a alta. De acuerdo con su director ejecutivo, Fernando Rosselot, afirmó que "Nos sentimos afortunados de poder poner a disposición de las comunidades afectadas por los incendios las opciones productivas y de restauración ecológica que nuestras investigaciones han generado. El énfasis del trabajo en San Antonio de Cuda, donde se desarrolla el Piloto, está puesto en la gobernanza, la participación y el ordenamiento territorial, buscaremos en conjunto con los la comunidad, opciones de diversificación forestal, sistemas agroforestales, productos forestales no madereros, hierbas medicinales, horticultura, técnicas y especies para la restauración de formaciones nativas, todas acciones consensuadas que permitan recuperar la capacidad productiva y restaurar zonas naturales de gran valor para la comunidad